Las nuevas prótesis denominadas de "Superficie o Recubrimeitno" están indicadas, en principio, en pacientes varones menores de 65 años y mujeres menores de 60 (sin osteoporosis) constituyen un gran avance por su mayor duración, menor frecuencia de dislocaciones y fundamentalmente por conservar hueso en vista a posibles revisiones.
Pregunta: Buenos días. Mi traumatologo me ha recomendado, después de muchos tratamientos para evitar la cirugía, que me opere de la cadera pero utilizando una prótesis de "recubrimiento" ¿Qué es una prótesis de recubrimiento de cadera? ¿Tiene alguna ventaja sobre las prótesis tradiciones?
Respuesta:
¿QUÉ ES UNA BHR?
Es una prótesis de cadera diseñada para gente joven y activa. Es un método menos agresivo de reconstrucción articular, conserva mejor la anatomía, biomecánica articular y la estabilidad. El diámetro de la prótesis es mayor que el utilizado en una prótesis de cadera convencional, significando un retorno a mayores niveles de actividad sin la preocupación de que su prótesis pueda luxarse.
Los dos componentes de su cadera son metálicos, y por tanto debería durar mucho más tiempo. La intervención quirúrgica conserva mucho más hueso ya que solo reforma la cabeza femoral en vez de cortarla, por ello en un futuro, si la prótesis necesita ser cambiada prácticamente la cirugía se consideraría como una prótesis primaria.
VENTAJAS
- Menor riesgo de luxaciones.
- Incorporación precoz a las actividades de la vida diaria y actividad deportiva
- Si necesita recambio por fracaso o desgaste mayor facilidad.
- Menor desgaste gracias a sus componentes metal-metal.
- Algunos estudios indican mayor rango de movilidad articular.
INDICACIONES
Pacientes jóvenes y activos de menos de 65 años para varones y menores de 60 para mujeres
CONTRAINDICACIONES-PRECAUCIONES
- No debe colocarse en pacientes que pretendan quedarse embarazadas
- No implantable en pacientes con insuficiencia renal.
- No implantable en pacientes con muy mala calidad ósea (osteoporosis) e imágenes quísticas de gran tamaño.
- No implantable en alérgicos al cromo-cobalto.
- No implantable en dismetrías de más de tres centímetros
DESPUES DE LA CIRUGIA
- Tiempo de ingreso: 4-5 dias.
- Inicio de la carga a las 24 horas de la cirugia.
- Al alta el paciente es capaz de caminar y subir-bajar escaleras.
- Tiempo de utilización de muletas 3-6 semanas.
- Permitido conducir a las 4 semanas (en función de la buena evolución del paciente).
- Deporte a los tres meses: bicicleta, natación (evitar la braza), marchas suaves, ejercicio aeróbico. El deporte de impacto no se aconseja hasta el año.
- DIA 1: sedestacion, ejercicios respiratorios, ejercicios activos de miembros inferiores, isometricos de cuadriceps, isquiotibiales y gluteos, caminar con muletas pocos pasos segun tolerancia.
- DIA 2: caminar aumentando el recorrido, añadimos escaleras y trasferencias al tratamiento.
- DIA 3-DIA 4: adquirir destreza previo al alta.
PRÓTESIS DE CADERA DE SUPERFICIE O RECUBRIMIENTO
Indicadas en principio en pacientes
varones menores de 65 años y mujeres menores de 60 (sin osteoporosis)
constituyen un gran avance por su mayor duración, menor frecuencia de dislocaciones y
fundamentalmente por conservar hueso en
vista a posibles revisiones.
Otra ventaja es permitir usar cabezas
grandes lo que reduce el riesgo de luxaciones; la cadera reproduce mejor la
anatomía y las ventajas biomecánicas son evidentes con menor riesgo de
alteración de la longitud (dismetrías) y del off-set (lateralización). Están
pensadas para pacientes jóvenes que quieren mantener un alto nivel de
actividad, con un buen hueso para evitar fracturas de cuello femoral y sin
mucha deformidad de la cabeza femoral que haría inestable la fijación de la
bola. Las ventajas cara a una reintervención futura son evidentes, porque
tendremos la oportunidad de colocar un implante como si fuera la primera vez,
sin pérdida ósea. En el mundo ya se han implantado más de 100.000 prótesis de
este tipo. La mayor parte de casas fabricantes tienen su modelo de resurfacing,
sobre todo desde la aprobación por la Agencia Americana FDA, su uso se está
extendiendo rápidamente. Prestigiosas revistas como el Journal of Bone (JBJS) ,
Journal of Arthropasty, etc. publican casi todos los meses artículos al
respecto.
Existe hoy amplio
reconocimiento y experiencia sobre el buen resultado que han tenido las
prótesis tradicionales de cadera, que, de hecho, constituyen uno de los mayores
avances de la medicina de los últimos siglos, pero
también han ido emergiendo a lo largo de estos años los problemas de la
duración de estas prótesis y, en consecuencia, de los necesarios recambios.
Especialmente se han ido haciendo evidentes los peores resultados en gente más
joven. Esto se debe a que cada vez es más frecuente que un
paciente joven se vea obligado a someterse a lo largo de su vida a sucesivos
recambios de prótesis; siendo cada uno más difícil, más agresivo y más
arriesgado que el anterior.
Con la idea de disminuir al mínimo la agresividad de los reemplazos
protésicos, sobre todo en pacientes jóvenes se han desarrollado en años más
recientes las prótesis de resuperficialización metal-metal. Estas nuevas
prótesis, a diferencia de las tradicionales, no emplean poletileno (un plástico
que se desgasta, tiene efectos tóxicos y limita la duración de los implantes).
Esto las hace idóneas para pacientes varones menores de 70 años y mujeres
menores de 65 (sin osteoporosis). Constituyen, por su diseño y mecánica un gran
avance por su mayor duración,
menor frecuencia de dislocaciones
y fundamentalmente por conservar hueso
en vista a posibles revisiones, (reintervenciones y recambios protésicos).
Denominadas como "hip resurfacing" o prótesis
de superficie o resuperficialización, no están indicadas en todas las caderas,
ya que su anclaje en un hueso muy deformado u osteoporótico es hoy por hoy muy
inseguro, pero si son una alternativa muy deseable en un 10-20% de los
pacientes, y especialmente en personas jóvenes que quieren mantenerse activas
(deportes) y prevenir problemas en una futura cirugia de revisión.
En este tipo de operación de la cadera, también
llamada prótesis de resuperficialización, la prótesis únicamente recambia la
superficie del cotilo y la superficie de la cabeza del fémur. A diferencia de
las prótesis convencionales, no se invade la metáfisis femoral ni el canal
femoral.
El par de fricción es metal contra metal.
El resurfacing representa aproximadamente el 10% de
todas las prótesis de cadera implantadas en todos los países que acumulan más
de 10 años de experiencia con esta prótesis.
EL RESURFACING DE CADERA EN LA PATOLOGÍA DEL ADULTO JOVEN
Desde
un punto de vista médico, el siglo XX conllevó grandes avances en todas las disciplinas.
Atendiendo a las ramas de la Cirugía Ortopédica y Traumatología, las décadas
finales del siglo XX supusieron jalones importantísimos desde un punto de vista
conceptual y material. Los avances respondieron a una madurez científica que,
fue, y es acompañada, por un desarrollo tecnológico y unas demandas sociales de
una sociedad cada vez más evolucionada y, por ello, más exigente. Tras una
primera fase de generalización de técnicas y tratamientos asistimos
a una segunda fase de especialización y profundización. Dicha evolución es
observable en un paciente más informado y exigente, que demanda, además de la eliminación
del dolor, una funcionalidad y resultados acordes al nivel de vida que el sistema
social le ofrece. En este marco, y dentro de la Cirugía de Cadera, hemos de centrar
todo el rango de soluciones que se están desarrollando bajo el paraguas de la Patología
de Cadera del Adulto Joven
- Resurfacing
Dentro de las opciones quirúrgicas en
creciente expansión se encuentra el Resurfacing de Cadera. Se trata de una
opción protésica que, conceptualmente, responde a criterios de máxima
preservación ósea y anatómica para el paciente, proporcionándole una
funcionalidad incluso superior con respecto a una prótesis total de cadera.
Como concepto, se apoya en una idea de
resuperficialización de la articulación de la cadera, mínimamente invasiva a
nivel cotiloideo y femoral. El diseño protésico reproduce la fisiología de la
cadera mediante una cabeza protésica que se adapta al máximo a la anatomía del
paciente. Los resultados finales para éste, son evidentes: una mayor propiocepción
tras la protetización, una menor invasividad de las estructuras óseas y de
partes blandas, que devienen en mayores oportunidades de tratamiento de futuro
en pacientes con altas expectativas de vida, y unas elevadas prestaciones
funcionales. Señalemos por ejemplo, un mayor rango de movilidad en comparación
con las prótesis totales de cadera habituales hasta ahora, y una menor posibilidad
de luxación.
Como idea no es ninguna novedad. Tiene
desde el punto de vista evolutivo una serie de jalones, ya clásicos, dentro de
la historia de la artroplastia de cadera. Ha sido un concepto recurrente, que
ha ido evolucionando en base a la tecnología y el método científico. Las distintas
fases sufridas en este camino han demostrado en el pasado, problemas relacionados
con el diseño de los distintos modelos con los materiales y tecnología utilizados
para su plasmación. Las conclusiones sacadas hablan de una necesaria selección
del paciente y de una estricta indicación. Se centra ésta, sobre todo, en
pacientes jóvenes y con buena situación ósea a nivel del cuello femoral. Aunque,
según criterio del cirujano, también puede indicarse en pacientes de edad más avanzada
y casos de displasia de cadera.